sábado, 3 de septiembre de 2011

Saitama 03/09/2006

Hoy tres de septiembre hace exactamente cinco años de la medalla de oro lograda en Japón que consolidó a la mejor generación del baloncesto de nuestro país. Aquel triunfo tuvo muchos significados y despertó muchas sensibilidades, buena parte de lo que generó tuvo que ver con la actitud del entrenador que llevó al equipo a lo más alto del podio y a la forma de hacerlo. Pepu Hernández llegó a la selección después haber entrenado en prácticamente todas las categorías de formación del Estudiantes, y de haber triunfado con el primer equipo colegial, con el que logró la Copa del Rey de 2000, el subcampeonato de la Liga 2003/04 y el subcampeonato de la Copa Korac 1998/99. Tras el éxito de Japón logro la medalla de plata en el Eurobasket celebrado en Madrid en 2007. Poco antes de las olimpiadas de Pekín, en el año 2008, la Federación Española de Baloncesto decidió retirarle del cargo de seleccionador.

La entrevista a las puertas del Madrid Arena en Noviembre del 2006. Foto: Fran Panadero.

Coincidiendo con el quinto aniversario de la final de Saitana, vuelvo a publicar en el blog la entrevista que le hice a Pepu tras aquel campeonato del mundo para el periódico Diagonal, cuando todavía se saboreaban las mieles de aquel histórico triunfo.

¿Cuál es la parte menos buena de todo esto?

Yo creo que hay muy pocas, son casi todas positivas. Quizá que ahora estoy mucho tiempo sin pisar cancha y sin entrenar. Pero tampoco es un gran problema por el momento.

Dijiste aquello de “os voy a decir una palabra. Y escuchadla bien, porque va a ser una palabra muy importante: ba-lon-ces-to”. Recientemente en el diario El País no mereció ni una línea el partido entre el Estudiantes y el Barcelona que juntó a 13.500 personas, ni tampoco la vuelta del Joventut a la Euroliga. En cambio, el partido de dieciseisavos de la Copa del Rey de fútbol entre el Alavés y el Celta ante 1.600 espectadores tuvo una columna entera para contarnos que fue un aburrimiento...

Yo pongo en duda la sensibilidad de algunos medios con lo que la sociedad está demandando. Creo que todos tendríamos que revisar qué es lo que estamos haciendo bien y mal, con autocrítica. En algunos casos los medios actúan de forma mecánica con determinadas situaciones y creo que de verdad no están siguiendo al día la sensibilidad que puede tener la gente con nuestro deporte. Dije que íbamos a hablar de baloncesto y lo dije sobre todo en el sentido de la cantidad de valores que puede transmitir este deporte, y creo que es lo que más ha llamado la atención este verano por el trabajo de la selección, por un grupo de jugadores que ha actuado de una forma natural, y yo creo que ha habido algo más que querer ganar. Por eso digo que hay una serie de valores que el deporte del baloncesto puede transmitir, y hablo de todo el baloncesto, no del baloncesto de la selección, sino de todo el baloncesto. Me da la impresión de que hay gente que quiere que compitamos con otro deporte, que es el fútbol, y nosotros no tenemos que competir con nadie, sino estar muy atentos a hacer nuestro trabajo bien. Tenemos la responsabilidad al estar acercándose gente al baloncesto, y hay que hacer que la gente se divierta y vea que es un deporte atractivo, que las chavalas y los chavales que jueguen estén cómodos, bien atendidos, que se sientan bien en este deporte independientemente de hasta dónde lleguen. El baloncesto no se mide única y exclusivamente por audiencias televisivas.

Dijiste también que baloncesto “equivale a educación, generosidad, solidaridad, trabajo en equipo, talante y tolerancia”. ¿Crees que son valores que socialmente se están transmitiendo?

Yo creo que el deporte es un medio más para transmitir valores, siempre he dicho que si un entrenador enseña sólo técnica y táctica es muy pobre, no es suficiente. Por eso debemos ser cada vez más tutores. Creo que a partir de ahí podemos hablar de añadir comportamientos sociales. Esto es una posibilidad más. Por ejemplo, ayer en el chiste de Forges una niña le decía a un niño en el patio del colegio: “Yo, cuando sea mayor, voy a ser pacifista” y el niño pregunta: “y eso, ¿dónde se estudia?”. “En casa”, sentencia la niña. En casa se aprenden cosas, en el deporte otras, o las mismas, por qué no. Todo está en contacto con la sociedad, cualquier momento o cualquier situación es buena para transmitir valores que nos hagan ser un poco mejores como personas. Más tolerantes, más generosos, más solidarios, etc.

Foto: Fran Panadero.

¿Cuál es el baloncesto que le gusta a Pepu?

Me gusta un baloncesto por supuesto técnico, con tácticas, pero una vez superado eso, lo que me gusta es el baloncesto de las sensaciones, de la sensibilidad. Donde el jugador o jugadora transmite todo lo que sabe. Que no sea un robot ni una maquinita. Que sepa hacer cosas y no parezca un guión totalmente preestablecido, porque creo que se nota inmediatamente. El aficionado quiere improvisación, genialidad, velocidad, poca racanería. El espectador quiere eso, y nosotros, la gente del baloncesto, queremos divertirnos de esa forma; creo que es mejor así.

¿Echas de menos un baloncesto más cotidiano, más de a pie, más de club...?

Yo ya dije que cuando entré en la selección no iba a trabajar a corto plazo, al ritmo de las competiciones. Bueno, lo tengo presente porque sé que es lo que se espera de mí, pero a mí me gusta trabajar a medio y largo plazo. Ver las posibilidades y las proyecciones que hay independientemente del tiempo que esté en la selección, donde me encuentro muy bien. Pero también es cierto que en un momento determinado podría echar de menos el baloncesto de competición diaria. La verdad es que no sé exactamente qué voy a hacer en el futuro.

¿Y el Estudiantes, se echa de menos?

Sí. Echo de menos todo. Porque cómo no voy a echar de menos con todo el tiempo que he estado trabajando en Estudiantes, pero así son las circunstancias. La decisión de dejar Estudiantes fue mía. Afortunadamente, bien o mal, es una decisión personal, de la que no me arrepiento. Pero sí echo de menos determinadas cosas, bueno, yo creo que a eso estamos acostumbrados todos.

¿Cuáles fueron las experiencias positivas de este Mundial, aparte de las más evidentes?

Yo no he cambiado, creo que sería un error si pensáramos que hemos llegado a algún sitio. Hemos empezado una nueva etapa, y muy bien. No sé si se esperaba o no pero evidentemente nosotros estamos encantados. Lo mejor es que el éxito ha sido muy bien acogido, hay muchísima ilusión tanto antes como después del campeonato, hay mucho agradecimiento y lo único que creo es que no tenemos que cambiar mucho, ser los mismos, ser gente que quiere hacer un buen baloncesto, que quiere mantener los valores que se han ido transmitiendo. Y si sumamos determinadas actuaciones, tanto individuales como colectivas, es posible que en un futuro volvamos a tener un premio importante. Debemos trabajar desde la tranquilidad, la humildad y la normalidad.

¿Cómo se consigue que conecten jugadores que ganan una fortuna, metidos en un sistema que les idolatra más como estrellas publicitarias?

No cuenta, cuando entrenas no cuenta absolutamente nada lo que cobras o lo que dejas de ganar. Sólo cuenta tu capacidad de entregarte al grupo, tu capacidad de apoyar, de formar parte de un proyecto. Es verdad que hay gente que no es así, pero también hay gente que conecta, que se siente bien trabajando al lado de otros y no piensa sólo en sí mismo. Como yo digo, cuando no hay más remedio pues se aplica la profesionalidad. Pero yo esto lo pongo en el ámbito del ‘tener que’, lo del ‘querer’ es otra cosa. Y yo creo que el ‘querer’ es mucho más divertido, querer hacer las cosas es mucho mejor, se hace con más facilidad, no te cuesta tanto esfuerzo. En ese aspecto hemos tenido una fortuna muy grande porque el grupo es muy especial, el grupo por el objetivo común está dispuesto a sacrificarse individualmente y eso es muy de agradecer.

Para terminar, ¿cuáles son, para ti, los placeres de la vida?

Los placeres de la vida para mí son muy sencillos. Estar con mis amigos, estar con mi familia un día entero, que últimamente no he tenido muchos. Pero ahora mismo es muy difícil no tener obligaciones muy directas. Ya digo, el estar con los amigos, una buena lectura, charlar y, por supuesto, hablar de baloncesto. Me gusta muchísimo hablar de baloncesto. Y no sólo de cuestiones técnicas o tácticas, de todo lo que rodea al baloncesto. Ya sé que muchas veces charlando no se arreglan las cosas, pero mira, alguna vez surge una idea, una línea a seguir y yo creo que en eso tenemos que estar.

13 comentarios:

Alejandro Díaz Triguero dijo...

Normalidad, tranquilidad, humildad... echo de menos esas palabras casi tanto como a Pepu. Yo pensaba que el triple de Teodosic había sido un buen gancho a la mandíbula, pero necesitamos otro aún mayor. Aunque claro, eso no lo deseamos ninguno.

Charlie Jiménez dijo...

Parece mentira que algunos se empeñen en complicar tanto el negocio. Como dice Pepu el baloncesto es un deporte de sensaciones, en el que la creatibidad, la intuición son parte esencial. No hay que buscar la cuadratura del circulo, todo es más sencillo: que fluya el baloncesto, lo demás son tonterias.

Por mal que les pese a algunos, Pepu forma parte de la historia de nuestro deporte, y con letras mayusculas.

¡Que vuelva PEPU!

Hugo Enojo dijo...

Ay Jacobo!! Cada vez que recuerdo las sensaciones que transmitía la roja de Pepu se me hace un pequeño nudo en la garganta y un enorme cabreo en el cuerpo, el cuchillazo que recibió la selección con su destitución ha dejado heridas que no se han curado, no hablo de las personas sino de la falta de entusiasmo y de colectividad que se han aposentado después. Ni Aíto, que no tuvo tiempo ni mucho menos Scariolo han conseguido aunar en el grupo el conjunto de valores de los que habla el maestro Pepu. Podemos ganar el campeonato, no tengo ninguna duda pero llevamos una derrota dentro con la historia. Gran entrevista.
Saludos

Anónimo dijo...

AMBERIS, la mascota del Eurobasket. ¿Qué representa? http://wp.me/p1

MINI MONI dijo...

Siento NO leer la entrevista.

No se lo q aportara pero es q me hace pensar en cosas del pasado q prefiero q no me "fantasmeen". Me alegro q le profeses esa admiración a Pepu. Creo q es importante conocer a la gente del todo y como funcionan a corta distancia. Es muy facil cuando todo sale bien(como aquí). En fin...siento q sea lo único q no leo de Sputnik. Perdoname Jacobo.
Un abrazo.

Jacobo Rivero dijo...

@Almanzor: Efectivamente,como dijo Teresa de Jesús, "vivo sin vivir en mi". Me gustarían otras formas pero deseo la mejor de las suertes a lo que hay.

@Charlie: Lo primero decirte que me he pasado por tu blog y me ha gustado. En breve lo incorporo a mi blogroll, que grande Nacho Solozabal, para mí fue un ídolo cuando dirigia al barça. En cuanto a lo que comentas estoy totalmente de acuerdo, cuando un equipo no fluye la desgracia aguarda a la vuelta de la esquina.

@Ferrán Blasco: Yo llegué a pensar que fue un sueño, que era el forofismo por Pepu lo que hacía que tuviera esa imagen de aquellos días. Pero este verano he revisado todos los partidos del Mundial de Japón y me he rendido a la evidencia, aquel equipo fue mítico y la forma de jugar, especialmente en defensa, impresionante. Nada será igual, su destitución fue un hachazo en toda regla.

@rubioquirosa. Un mineral típico de Lituania, o algo así escuche hace poco.

@Mini Moni: Gonzalo eres un ateo de la iglesia pepuistica, pero sabes que te lo perdono ;-)

Un saludo a todos, y gracias por los comentarios.

costalgaraldals dijo...

Que vuelva a la Penya ¡¡¡¡
xd xd, que duro va a ser este año para nosotros.

costalgaraldals dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
marta dijo...

No nos estaremos equivocando con tanta comparación y tanta nostalgía?
No,me refiero a lo que hemos visto en cuanto a juego,me refiero al equipo.
Han pasado cinco años,han crecido física,mental y profesionalmente,han vivido experiencias humanas y deportivas(algunos han llegado a lo mas alto)que les ha marcado un caracter y un "aquí estoy yo"que quizás hace cinco años no existia.
Creo que pretender aquella conexión,aquel grupo humano del que se habla en la entrevista de Pepu,es dificil para Scariolo.
Teresa de Jesús tb decía que la paciencia y la fé todo lo alacanza,algo así.Tendremos paciencia con Scariolo y fé en los jugadores.
Si que el ambar es una piedra preciosa,seguro que la conoceis y por lo visto la primera que se encontró trabajada hace muchísimos años,fué en un país del mar Báltico.
Un saludo

Jacobo Rivero dijo...

@marta: En parte estoy contigo, pero igual que miramos de entonces ahora, habrá que mirar lo que ocurrió antes de ir a Japón hasta la victoria en Saitama. Yo creo que Scariolo es un gran entrenador -aunque no me va su estilo-, que tenemos unos jugadorazos, y que espero que logremos el oro. Puedo tener paciencia y fe, pero sigo pensando -y reconozco que hay algo de nostalgia- que Pepu fue lo mejor que le pudo pasar al baloncesto en nuestro país, y que por diversos motivos ahora no esta al frente de la selección.

Un saludo, y muchas gracias por el comentario.

MINI MONI dijo...

Jacobo,

Efectivamente. Y si encima Pepu es como un líder dawidiano de esos, no quiero acabar como los de waco. La verdad es de mafioso le pintaron muchas veces. A él y a muchos del club.
La religión para los q fuman opio...

MINI MONI dijo...

Quiero comunicar que siento mi equivocado comentario anterior. Por escrito no se le puede llamar mafioso(no lo es) , pero mi intención era hacerlo de manera informal(como cuando lo hacemos hablando). Tampoco es "Dawidiano" pero es q Jacobo me ha tentado cuando comentaba lo de q era ateo...jajajaj. Lo siento.

Un abrazo crackk(Jacobo).

Jacobo Rivero dijo...

@Mini Moni: Don't worry, la referencia al rancho Wako era muy grande. Yo me veo un día atrincherado en La Nevera con pocas balas y excaso alimento...

Un saludo crack, y gracias por los comentarios.